Si viajas solo, estos consejos son imprescindibles
Por Otto Rodríguez
OneTravelGuru.com
Viajar solo es una de las experiencias más placenteras que uno pueda tener si sabes sacarle provecho a cada instante de tu soledad y logras comprender que unos días sin ataduras es algo que puede ser muy edificante.
Estas son algunas recomendaciones para aquellos que prefieren viajar solo o están considerando emprender una aventura de ese tipo:
1) Aprende el arte de observer a la gente
La primera vez que viajé a París me sentí ofendido al sentarme afuera de un café a la orilla del Sena y ver que pasaban los minutos y ningún camarero venía a tomar la orden. Me tomó un rato entender que parte de aquella experiencia era precisamente poner el apuro (tan característico de la sociedad estadounidense) a un lado, y sencillamente ver la vida pasar. Recréate en las costumbres, el vestuario, la manera de caminar de los transeúntes y el idioma. Mirar a la gente durante un viaje es quizá la mejor manera de absorber una cultura diferente. Y por favor, deja Twitter a un lado.
2) Habla con la gente local
Hablar con extraños puede que te intimide si viajas solo, pero si lo intentas verás cuán gratificante es. No sólo conocerás aquellos lugares que vale la pena visitar fuera de las “trampas turísticas”, sino que puedes aprender de la cocina, costumbres y hábitos que no aparecen en los libros ni revistas de viajes. Antes de subirte al avión, pregunta a amigos y familiares si conocen alguna persona que vive en el país que piensas visitar. Ello pudiera abrirte algunas puertas interesantes e inesperadas.
3) Haz un intento serio por hablar el idioma
Aunque creas que no es importante, una buena parte de la planificación de cualquier viaje es aprenderte algunas palabras y frases esenciales del país que piensas visitar. “Por favor”, “gracias”, “hola”, y algunos otros verbos relevantes pueden sacarte de un apuro cuando menos lo esperes. Olvídate de la fonética y la perfección, los locales aprecian los viajeros que hacen el esfuerzo por comunicarse en el idioma nacional.
4) Ignora los mapas y las direcciones
A no ser que necesites llegar a un sitio, lugar o dirección muy particular y te encuentres realmente perdido, trata de ignorar los mapas y las aplicaciones de mapas. En muchas de las principales ciudades europeas, por ejemplo, es preferible caminar en sentido general hacia tu destino, perdiéndote sin una planificación eficiente, por avenidas y callejuelas. Al final es preferible mirar a tu alrededor y absorber todo lo nuevo que tener la vista fija en la pantalla de tu teléfono.
5) Apaga el teléfono
El peor viajero es aquel que no puede desprenderse del teléfono y de todo lo que lo ata a la realidad que deja atrás. Incluso si no sabes a adónde vas y andas perdido, acepta el reto, pues uno nunca sabe lo que le depara lo desconocido.
6) Cuando tengas dudas, vete a un parque
Usualmente en casi todas las ciudades del mundo los lugares más bellos tienen un sabor de naturaleza. No hace falta escalar una montaña de dos kilómetros, especialmente si viajas solo; basta con sentarte a disfrutar de una tarde en un parque, y si te animas a hacer un picnic en solitario, pues mucho mejor.
7) Mézclate con la gente
Para conocer realmente un país y su cultura, no hay como perderte en la multitud. Parte de tu planificación debes dedicarla a conocer la vestimenta común del lugar que visitarás y sus costumbres. Por lo general, es recomendable dejar en casa los pantalones cortos y las chanclas. No es buena idea viajar solo y parecer un turista.
8) Ten precaución y usa el sentido común
Prepararte para cualquier contingencia durante tu viaje no es precisamente tener una mentalidad pesimista, sino todo lo contrario. Dale tu itinerario completo a un familiar o amigo e infórmate sobre las condiciones sociales del país que visitarás. El Departamento de Estado de Estados Unidos publica una útil lista de recomendaciones en ese sentido.
9) No olvides escribir un diario
Las buenas fotos te ayudarán a recordar los lugares que visitas y enseñar tus aventuras a amigos y familiares, pero un buen diario te hace revivir esos momentos. Escribe donde se te antoje, lo mismo en boletos de trenes, recibos de souvenirs o en las servilletas de ese restaurante especial.
10) Envía postales
En un mundo en que los manuscritos cada vez se usan menos, enviar una postal de puño y letra es algo muy original. Ya sea para un amigo o familiar, una postal enviada y recibida desde lejos tendrá un toque especial de recuerdos y amor.