Taos, paraíso de arte en Nuevo México
Por Otto Rodríguez
OneTravelGuru.com
Taos, en el norte del estado de Nuevo México, es una de las localidades más coloridas y extraordinarias de Estados Unidos.
Esta ciudad ubicada muy cerca de una localidad de indios nativos americanos, conocida como pueblo, es célebre por sus históricas edificaciones de adobe en las cuales han vivido generaciones de indígenas desde tiempos inmemoriales. Se estima que las primeras edificaciones del pueblo datan de entre el año 1000 y 1450.
Taos ofrece al visitante una amplia variedad de galerías y museos que promueven y exhiben el arte regional de los indios nativos y de reconocidos artistas de diversas épocas que comenzaron a radicarse aquí a partir del año 1899.
La localidad cuenta con decenas de edificios que aparecen listados en el registro nacional de edificaciones históricas de Estados Unidos. La mayoría de ellos albergan estudios y museos relacionados con esos creadores. Entre ellos figura Bent House, un museo con memorabilia relacionada con la historia de Taos y sus orígenes, y The Firehouse Collection, que exhibe obras de Joseph Sharp, Ernest Blumenschein, O.E. Berninghaus y Leon Gaspard, algunos de los pioneros del movimiento artístico de la ciudad.
Adornada por la majestuosa cordillera montañosa Sangre de Cristo, esta localidad cuenta con poco más de cinco mil habitantes, quienes, junto a las decenas de miles de personas que visitan cada año la zona, disfrutan de un remanso de paz en un clima y topografía semi-desérticas.
Una de las tradiciones más conocidas aquí son las Fiestas de Taos, celebración anual que honra los dos patrones de la ciudad: Santa Ana y Santiago, y que tiene lugar a fines de julio.
Esas fiestas son también la manera que tienen sus habitantes de preservar las ricas tradiciones culturales de esta región de Nuevo México.
